Creo que mis momentos de "inspiración", desde la adolescencia se dan en un momento muy particular del día: cuando viajo en colectivo. Hay algo en ese momento entre el caos del tránsito y esta selva urbana que me hace reflexionar sobre muchos ámbitos de mi vida. Fue así hace unos días, cuando estaba pensando en aquellos "sí" existenciales...
¿Cuántas veces nos hemos preguntado el famoso y tan ponderado "qué hubiera pasado si"...? Pues partiendo de esa premisa, llegué a un arcoíris de hermosas conclusiones que me conducen a mi actual existencia en todo su esplendor... ¿Qué hubiese pasado en mi vida si...?...
Por años cuestioné el por qué de ciertas cosas. Precisamente ayer, hablando con una compañera de la facu sobre el contenido de este blog, ella me hizo una pregunta muy importante (al menos para mí)... Me preguntó si mi condición (mi obesidad) es genética... ¡Finalmente alguien lo entendía claramente! Pues sí... En la lotería genética, salí sorteada y me tocó A MÍ. Las estadísitcas son claras y tajantes y aunque muchas veces no soy partidaria de dejarme llevar por los números y no creo que eso debería determinarnos en la vida, en este caso y POR EXPERIENCIA, puedo asegurar que es una verdad absoluta y yo soy parte de esa estadística: EL 50% DE NIÑOS, CON PADRE O MADRE OBESOS, DESARROLLARÁ ESTA ENFERMEDAD EN ALGÚN PUNTO DE SU VIDA. El porcentaje es mucho mayor (80%) cuando AMBOS PADRES LO SON, y ni qué decir cuando se tiene a uno o dos o incluso los cuatro abuelos con esta condición... En mi caso era prácticamente inevitable: Abuelo, Papá, Mamá... Una gran carga genética...
De la infancia y adolescencia mis recuerdos en familia son de unos CELOS INCREÍBLES. Vengo de una familia donde todos tenemos nuestros encantos y nos caracterizamos por ser MUCHAS MUJERES; como bien saben, no tengo hermanas pero sí muchas primas y para mí fue TORTURANTE por muchos años crecer en una familia donde todas mis primas se convertían en HERMOSAS SEÑORITAS... Para nadie es un secreto ya que siempre lo dije en voz alta y a full color: Siempre me sentí el patito feo de la familia, porque así me veía, así me hacían sentir (quizás inconcientemente, indirectamente, pero aunque no lo crean, era así). Fue ahí que tuve que adaptarme como toda especie en evolución, desarrollar otros "encantos" y no crean que me estoy quejando, sino que les hablo con la más cruda sinceridad que me caracteriza... Y ahí viene el "si" más importante en mi vida...
¿Qué hubiera sido de mí si yo no tuviera esta enfermedad? Creo que esta es la pregunta más intensa que me he planteado por años. En los momentos de oscuridad, cuando casi me he dejado vencer por los prejuicios, los insultos y aquellos masacrantes apodos que nos ponen a los "gorditos": pelota de playa, tanque ruso, "PAIVA" (un apodo más que INSULTANTE que me gritaron muchas veces después de aquel trágico 1 de agosto...) y muchos otros que ni se imaginan; es la respuesta a esa pregunta la que me saca de vueta a la luz y me devuelve mi característica e incansable sonrisa al rostro. Si no hubiera sentido todo lo que sentí, si no hubiera llorado todas esas lágrima, ni me hubiese sentido tan humillada por tanto tiempo, ni luchado tanto por mí misma, simplemente no sería quien soy HOY, porque no valoraría ni las emociones, sentimientos ni relaciones de todo tipo... sería una más de las demás...
Pero todo a mí me ha costado más que a los demás, gracias a esta sociedad ignorante y poco tolerante. Sé lo que es estar en el paredón de fusilamiento y estar siendo juzgada CONSTANTEMENTE. Sé lo que se siente la otra cara de la moneda, estar siendo apuntada con el dedo y escuchar los cuchicheos y las risas de burla... Y por años caí en la negación de mi condición, en la negación de mi propio yo... Y seguía haciéndome daño, emocional y físicamente... Hasta que decidí parar y analizar mi vida, ahí entendí que a mí me tocó esta condición, debí aceptarme tal cual y por el camino tomé decisiones acertadas pero también incorrectas... Comencé carreras que no terminé... Pero todo esto TENÍA QUE PASAR y todo a su tiempo y momento. Gracias a eso conocí a tanta gente increíble, y ahí, terminé conociéndome a mí misma.
Gané hermosas experiencias y aunque muchos dirán que perdí el tiempo, para mí era simplemente el tiempo que necesitaba para encontrar mi propio camino y a mí manera. Y si hubiera terminado cualquiera de las carreras que empecé, simplemente no hubiera conocido a toda esta GENTE HERMOSA que hoy me rodea, mis nuevos amigos!!! =)
Y si no me hubera sentido el PATITO FEO de la familia por tantos años, simplemente no me convertiría en el HERMOSO CISNE que hoy soy. Quizás simplemente para mí NO ERA SUFICIENTE LIMITARME A SER UN PATO... Tenía que ser EXCEPCIONAL y nadie jamás pondrá en tela de juicio como me siento hoy: SOY HERMOSA más a allá de lo físico. Es simplemente LO QUE SOY en la integridad de mi ser. Así que no me arrepiento de mis errores porque mis fracasos son el cimiento perfecto de mi ÉXITO y son aquellos (los fracasos) los que me hacen valorar más mis conquistas... =)
Antes de despedirme quiero agradecer muy particularmente a mis compañeros a quienes dedico esta entrada por sus hermosas palabras de aliento... Todos ustedes son muy especiales para mí y ocupan un lugar súper privilegiado en mi vida desde ya... Chiara: Fue tu comentario lo que inspiró gran parte de este blog... Gracias por leerlo y por tus palabras, en serio me emocionó cuando dijiste que te hizo soltar lagrimitas!!!... Efrén y Diego: Mil gracias por lo que me dijeron anoche, que yo aporto luz al grupo... en serio ese tipo de palabras son la motivación para que mi luz siga brillando más y más... Gracias por hacerme sentir tan especial, aceptada y querida!!! LOS AMO EN SERIO A TODOS!!! =) ♥
A todos ustedes mis queridos lectores... Gracias por su tiempo y por acompañarme en mi NUEVA VIDA...
Les dejo un abrazo gigante y un beso enorme!!!
Love... Love...
Yen ♥
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